Pros y contras de ser tu propio jefe

Trabajar por cuenta propia es un camino complicado y que tiene un gran impacto en las finanzas personales. Emprendedores, empresarios, profesionales independientes, comerciantes y otros trabajadores autónomos tienen que generar sus propios ingresos, pues no tienen una relación de dependencia con alguna empresa o institución.

Y como todo en la vida (en la que nada es completamente blanco ni completamente negro), esta modalidad laboral tiene sus ventajas y sus desventajas. Considéralas, ya sea que estés pensando en trabajar de esta manera o ya lo estés haciendo.

Ventajas de ser un trabajador independiente

1. La ventaja más directa y obvia de este modelo laboral es la independencia. Siendo tu propio jefe, eres tú quien toma las decisiones, puedes disponer de tu tiempo como lo prefieras, pones el esfuerzo que tú creas conveniente, escoges la forma de hacer las cosas y manejas el dinero.
2. La siguiente ventaja tiene que ver precisamente con el dinero. Si el negocio o la actividad que realizas va bien, es posible que recibas pagos mayores a lo de un trabajo en el que dependas de un jefe. Tu posibilidad de ganar dinero es ilimitada a diferencia de estar en una organización, donde siempre hay un tope.
3. El trabajo independiente suele ser mucho más motivante y satisfactorio que el estar trabajando para otros, ya que te podrás involucrar en distintas actividades y áreas (compras, ventas, finanzas, marketing, gestión del personal, atención al cliente…), además de que podrás aplicar las soluciones que mejor se adapten a tu situación.
4. Desarrollas tu creatividad y tus ideas. Sin jefes, tienes plena libertad para realizar ideas o proyectos que, con un empleo, no podrías echar a andar o te resultaría complicado. Pondrás tu sello personal a todo lo que hagas sin restricciones.
5. Tu crecimiento te permitirá abrir fuentes de ingresos extra. Por ejemplo, si ya tienes un negocio, puedes abrir otro más, convertirte en consultor o mentor, invertir en otros proyectos… Las posibilidades son varias.

Desventajas del trabajo independiente

1. La primera desventaja tiene que ver con el dinero. Los ingresos por cuenta propia suelen ser irregulares y estar sujetos a los vaivenes de la economía, por lo que resulta más difícil planificar. Además, no hay garantías de continuidad.
2. Si eres tu propio jefe, pierdes algunos beneficios económicos que tenías como trabajador dependiente: aguinaldos, prima vacacional, seguro de salud, entre otros.
3. En algunos casos, para que la actividad independiente arranque se necesita de una suma de dinero (a veces muy elevada).
4. Por supuesto, cuando recién se inicia con la actividad independiente (sea un emprendimiento o sólo el ofrecer tus servicios como profesional), también se tendrán ingresos muy apretados hasta que se comiencen a dar mayores frutos.
5. Será necesario que hagas varias tareas, no solamente las que son propiamente de tu actividad: estrategia, operaciones, relaciones públicas, marketing, administración… También tienes que dedicar tiempo y esfuerzo a la búsqueda de oportunidades.
6. Los horarios y demandas de un negocio propio pueden ser mucho más amplios que los de un trabajo tradicional, y no siempre los ingresos acompañan en forma directa el esfuerzo extra.