Indudablemente, lo mejor que podemos hacer para crecer profesionalmente, tanto en el mundo de las ventas como en cualquier otro, es conocer nuestras debilidades para poder trabajar en ellas y mejorarlas (o hasta exterminarlas).
Y es que el cometer errores es algo que le sucede a todos. No está mal tener tropiezos, pero lo que sí está mal es no hacer nada para mejorar y seguir cometiendo el mismo error una, dos, tres veces. Por esta razón, te compartimos algunos de los errores más comunes que un vendedor puede cometer.
Evítalos para tener más cierres exitosos.
Vender un producto o servicio sin conocerlo
Esta es una de las peores cosas que puedes hacer: no conocer a la empresa a la que perteneces y mucho menos el producto o servicio que vendes. Hoy, lo más importante para logar vender con éxito es que logres transmitir cómo es que tu producto o servicio resuelve las necesidades del cliente, cómo le da valor.
Para logar esto, debes conocer a profundidad lo que vendes: sus características físicas y hasta aquellas que no se ven, pero que dan resultados; las ventajas que tiene en el mercado y frente a la competencia; y los beneficios que puede darle al cliente.
También es muy importante que estés convencido de todo lo que dices, porque si no es así, puede reflejarse en tu venta y evitar el cierre con éxito.
No prepararte antes de una venta
El creer que todo se tiene bajo control puede salir muy caro. Es muy importante conocer a tu cliente antes de conocerlo y contactarlo. Hay que prepararse y repasar el plan una o dos veces.
Además de esto, asegúrate que al momento de realizar la visita lleves la vestimenta adecuada, una presentación que vaya acorde a sus necesidades, casos de éxito, presupuestos, beneficios y, si puedes, el producto.
Insistir demasiado
El ser demasiado insistente hará que el cliente se aleje de ti, incluso se podría dar el caso de que sí logres cerrar la venta, pero no se sentirá lo suficientemente cómodo o bien con la compra y no te recomebdará.
Deja tu desesperación y necesidad de cerrar ventas a un lado, y enfócate mejor en atraer al prospecto. Tienes que ayudarlos a concluir que comprarte tiene sentido y que será de gran valor para ellos. Esto lo lograrás preguntándoles por su problema o deseo, y ayudándolos a visualizar la forma en la que tú puedes resolverlo.
No tomarse en serio las ventas
Muchas personas ven las ventas como un mientras… consigo un mejor trabajo o un empleo formal, obtengo un puesto en tal empresa, emprendo mi negocio. Pero debes saber que las ventas son como cualquier profesión: el vendedor debe estudiar, prepararse, actualizarse, amar lo que hace. Esa es la única forma de llegar al éxito. Hay que tomárselo como una profesión no como un empleo temporal.
No saber prospectar
A nadie le gusta estar en un lugar en el que no tiene oportunidades de crecer, pues lo mismo sucede con un vendedor que está perdiendo su tiempo con alguien que no está interesado en comprar su producto o servicio. Por eso, una de las reglas básicas es saber prospectar, y un buen cliente debe contar con las siguientes características: debe tener la necesidad de tu producto o servicio, tener la capacidad económica para adquirirlo y la capacidad de tomar la decisión de compra.
Desanimarse ante un “no”
No siempre tendrás cierres exitosos, así que tienes que saber manejar la frustración. La actitud es muy importante, pues no todo depende de tu experiencia técnica, también juegan un rol trascendental tus cualidades como persona: integridad, creatividad, proactividad, etc.
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