Maricarmen es una mujer que toda su vida se ha dedicado a las ventas y ahora, con 70 años, manifiesta que ella no piensa retirarse, pues el negocio que tiene con Lebasi la motiva, lo cual no sólo se debe a las ganancias que obtiene, sino también porque consume diariamente el lactoserum suizo que la mantiene llena de energía.
“Yo estuve enferma en el 2001. Me dio una enfermedad llamada púrpura trombocitopenia inmune y ahí es cuando yo conocí Lebasi; me lo recomendó un médico naturista para elevar las defensas porque como su nombre lo dice son enfermedades autoinmunes y necesita fortalecer mi sistema inmunológico. Desde ese entonces tomo Lebasi y, posteriormente, me hice empresaria”, cuenta.
Ella decidió entrar al negocio después de que vio los resultados del producto en su cuerpo. Y si bien menciona que las ganancias son buenas y que un plus del negocio es que al consumir Lebasi abonas a tu salud y te sientes bien, la mayor satisfacción que ha obtenido es el agradecimiento de sus clientes.
“Creo que lo mejor de esto es que te digan gracias por haberme presentado este producto. Cuando a la gente se lo llevas y te dice: Gracias a dios y a ti que me trajiste Lebasi. Finalmente, lo más caro en esta vida no tiene precio”.
Si bien dice que hacer empresa con Lebasi sí es una buena oportunidad, recalca que es como cualquier trabajo, hay que esforzarse y poner atención si uno quiere ganar bien y crecer. Para ella, un día de trabajo consta en, primeramente, arreglarse para lograr tener una buena imagen, porque “Todo mundo nos vendemos, y más nosotros que tenemos que reflejar bienestar”. Luego, hay que revisar tu itinerario o tu agenda, que ella arma desde un día antes, “para atender a las personas y no ir sin rumbo”.
Durante la pandemia, Maricarmen se enfrentó al hecho de que no podía salir tanto de casa para hacer promoción de Lebasi y estar al pendiente de sus clientes, y aunque no ha utilizado tanto la tecnología como le gustaría, sí implementó el uso del teléfono para atender a sus consumidores.
“Una de las estrategias que más me ha funcionado es la de traer siempre un bote abierto conmigo para dar a probar. Cuando yo veo a la gente bien interesada, le regalo una cantidad de Lebasi para 5 días. Se la toman y al rato ya te están hablando para comprar su bote”.
¿Por qué recomendaría Lebasi como producto y negocio?
Una de las cosas que subraya es que, por ejemplo, para una mujer que busca estar al pendiente de su familia, Lebasi es una buena oportunidad para ganar dinero y desarrollarse profesionalmente, ya que brinda la libertad de organizar tu tiempo de trabajo como prefieras y más te convenga. Así no descuidas lo familiar.
“Como negocio te da una seguridad económica y tienes una compañía que te respalda a ti y al producto que vendes. Como alimento que puedes consumir, te ayuda a prevenir, a estar bien alimentado para que tu cuerpo resista a cualquier enfermedad. Yo no he encontrado otro producto similar que sea alimento, porque todos los demás son suplementos o complementos”.
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